Sostenibilidad | 31 Aug 2022
Ventanas Passivhaus: Eficiencia para hogares más sostenibles
Las casas passivhaus son una tendencia en arquitectura que ha venido para quedarse y que gana adeptos.
Cada vez son más los consumidores que están comprometidos con llevar un estilo de vida más respetuoso con el entorno, por lo que ofrecer ventanas passivhaus en tus proyecto, puede ser todo un acierto.
Con este post queremos que te familiarices con sus características para que cuentes con esta opción y no te quedes a la cola del sector.
Por qué apostar por ventanas Passivhaus
Las ventanas juegan un papel clave para garantizar la máxima eficiencia energética y por consiguiente, para ayudar a ser más sostenibles.
En concreto, las ventanas passivhaus son las más eficientes y con mejores prestaciones que existen en el mercado. Esto es así debido a que están certificadas por el estándar Passivhaus, el más exigente a nivel mundial.
En este estándar de edificación, las ventanas son uno de los pilares para la optimización de la energía en el hogar. Y, es que, estos elementos contribuyen tanto al aislamiento y a la hermeticidad, como a la captación y protección solar, así como al aprovechamiento de luz natural.
Dicha certificación, es otorgada por el Passive House Institute, organismo que verifica el cumplimiento de los siguientes requisitos, que son altamente exigentes, sobre todo en cuanto prestaciones de aislamiento térmico.
- Necesitan un vidrio muy eficiente con una o dos cámaras. Además, precisan de vidrios bajo emisivos para evitar la pérdida de temperatura hacia el exterior.
- Las ventanas passivhaus requieren tener un coeficiente de transmitancia térmica de 0,8 W/m²K máximo, o en el caso de ventanas instaladas en el muro, igual o menor a 0,85W/m²K.
- La instalación ha de ser muy cuidadosa para garantizar la más completa estanqueidad y hermeticidad.
- Es fundamental que se instalen separadores térmicos de alta calidad con baja tasa de transmitancia térmica.
Es importante tener en cuenta que no todos los requisitos son fijos, sino que varían en función de la zona para la que se solicite la certificación y el clima de la misma.
Dos elementos indispensables a considerar son el sellado entre el marco y la fachada, además de la ubicación exacta en el que se colocarán las ventanas passivhaus. De ahí que las casas passivhaus suelan situar sus ventanas en las paredes con orientación Sur y evitan su colocación en la zona Norte.
Aislamiento térmico excelente
Usando un grosor adecuado de aislamiento térmico, para crear las adecuadas roturas de puente térmico en el caso de ser necesario.
También ayudan en la mitigación de los ruidos provenientes del exterior.
Ventilación saludable
Esta filosofía de construcción insiste en la importancia de que el aire sea lo más puro posible.
Por eso las ventanas passivhaus se diseñan no solo con ventilación incorporada, sino con la capacidad de aprovechar la acción del sol. Así climatiza ese aire que entra en la vivienda, a la vez que facilita la salida del aire viciado.
Ahorro de energía y económico
En las casas passivhaus se cuida al máximo la estanqueidad al aire. Es decir, todas las uniones entre los diferentes materiales y elementos de la vivienda, como es el caso de las ventanas, están perfectamente sellados.
Por ende, se reducen las pérdidas energéticas. Así que, es posible controlar la temperatura del interior del hogar con una mínima intervención de los sistemas de climatización… Con el consiguiente ahorro y reducción de la huella medioambiental que esto conlleva.
¿Te ha resultado útil este post? Darle un vistazo al artículo ‘Pérgolas bioclimáticas: Qué son y cuáles son todas sus ventajas’ te ayudará a acompañar a tus clientes hacia la eficiencia y la sostenibilidad.
Además, si lo deseas, estaremos encantados de ofrecerte asesoramiento experto en ventanas passivhaus y mucho más. Todo ello para que ofrezcas un gran confort y consigas superar las expectativas de tus clientes.